El temor

El temor es uno de los mayores problemas de la vida. Una mente que está atrapada por el temor vive en confusión, deformada y de alguna manera agresiva.
 No se atreve a desviarse de sus propios patrones de pensamiento, lo que engendra hipocresía. Hasta que no nos libremos de temor permaneceremos siempre en la oscuridad.
Libera tu mente, escucha tu corazón.

Desde pequeños recibimos una educación caracterizada por el temor y la competencia, todos estamos agobiados por temores de alguna especie, el temor pervierte, arruina y oscurece nuestros días.
No hay temores abstractos, existen siempre en relación con algo. Temor a perder el trabajo, en consecuencia entra en juego el temor a no tener suficiente dinero para alimentarnos y perder su posición en la sociedad, etc, o el miedo a lo que los demás piensen de nosotros, miedo a ser despreciado, a no ser amado, ridiculizado por los demás, al dolor físico, enfermedades, a ser dominados, de perder su fe.....
¿Que hacemos, huimos de ellos ? ¿ O inventamos ideas o imágenes para ocultarlos ?
Huir del temor solo hace que crezca.
Empezar por enfrentarnos a nosotros mismos tal y como somos, examinar cada temor, si nuestra mente trata de vencer el temor , de reprimirlo controlarlo, transformarlo en otra cosa, habrá tristeza, conflicto y en consecuencia una gran perdida de energía.
En este momento que estoy sentada aquí, no tengo miedo ni temor, pues estoy en momento presente, aquí ahora.
Una de las funciones del pensamiento es estar ocupado siempre en algo par evitar el vernos tal como somos. Tenemos temor de sentirnos vacíos, de observar nuestros temores.
Cuando comprendamos que el temor es un simple movimiento que se manifiesta de diferentes modos, y cuando veamos el movimiento y no el objeto al cual ese movimiento se dirige, estaremos enfrentándonos a ese temor, miedo o problema viéndonos al fin como seres de luz que somos.
Vivir con algo tan vital como es el temor requiere una mente y un corazón extraordinariamente sutiles, sin que tengamos que llegar a conclusiones y que puedan por tanto seguir cada evolución.

Vivir en el presente es la percepción instantánea de la belleza y el gran deleite que ahí reside, sin tratar de sacar placer de todo ello.

Leer las enseñanzas de un Maestro siempre me hacen reflexionar sobre el mensaje que recibo, en este caso el Maestro Krishnamurti  me ha transmitido este mensaje que comparto con vosotros, gracias.

Namasté

2 comentarios:

Unknown dijo...

Me encanta Armonía, hay que desprenderse de todo lo que no sea aquí y ahora.
Es una lección que estoy intentando aprender día a día, pero resulta muy difícil de asimilar, nos rodean continuamente conflictos que no nos dejan centrarnos...

Vamos a conseguir el objetivo!

Armonía dijo...

Es un trabajo personal difícil si, pero hay que seguir trabajando en ello, cada día la vida me demuestra que el desapego crea paz interior, desde luego las energías que nos rodean nos afectan, ser conscientes de ello nos hace ver y actuar en consecuencia.
Trabajando lo conseguiremos , es un trabajo, un estudio y un hacer que dura toda la vida.
Nada es fácil pero el esfuerzo siempre tiene su recompensa.
Namasté corazón bonito.