
Hemos llegado a pensar que una persona es inteligente si tiene una serie de títulos académicos o una gran capacidad dentro de alguna disciplina, un gran vocabulario, una gran memoria para recordar datos superfluos..etc.
Creo que la verdadera inteligencia es vivir una vida feliz y afectiva, viviendo cada día, cada momento de ese día estando en el presente, afrontando y entendiendo a los problemas como algo que son parte de la condición humana, que son parte de la vida, no midiendo la felicidad por la ausencia de ellos, eso es la inteligencia .

Siendo dueño de tus propias emociones,observándolas y aprendiendo a controlarlas, no tendrás que escoger reacciones de autoderrota.
Cuando aprendamos que podemos elegir lo que preferimos sentir, empezaremos a encaminarnos por la verdadera senda de la inteligencia, una senda que no tiene caminos laterales hacia el colapso nervioso. Esta senda para nosotros sera nueva, porque la consideramos una emoción dada como una opción y no como una condición de la vida.
Podemos controlar las propias emociones empezando por el proceso de estar a cargo de nosotros mismos, tanto mental como emocionalmente. Debemos confiar en nuestra capacidad de elegir el sentir de nuestras emociones en cada momento de nuestra vida, no resultara fácil pues son demasiadas las energías que en nuestra sociedad conspiran contra la responsabilidad individual, queriendo controlarnos, debemos aprender a escuchar nuestro interior y alejarnos de personas o situaciones que nos hagan sentir ese sentimiento.Tú tienes el poder de elegir.
Las dificultades de la vida son parecidas para todos, cada ser humano con quien compartimos en cualquier contexto de nuestra vida social, tienen las mismas dificultades, el dinero, la vejez, las enfermedades, la muerte, los desastres naturales, son acontecimientos que nos afectan a todos los seres.
Hagamos que nuestra mente trabaje a nuestro favor, y poco a poco adquiriremos la costumbre de no molestarnos cuando las cosas vayan mal, meditemos la solución si es responsabilidad nuestra, preguntémonos si sintiéndonos mal hacemos algún cambio en ese conflicto que estamos viviendo en ese momento, si vale la pena y si nos compensa sentirnos infelices, heridos u ofendidos, escuchemos como aprendices sin dejar que las opiniones ajenas afecten a nuestro sentir.
Paseo uniéndome a la Naturaleza viva, y ella me hace sentir calor, transformando mi sentir....
2 comentarios:
Que bien me siento después de tu clase, se me quitan los dolores que llevo. Los estiramientos, que hacemos son geniales, la relajación todo en global.
OM SHANTI…
Gracias, de eso se trata, me alegro mucho de que disfrutes.
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