Quietud

Cuando el ojo no encuentra nada para ver, la nada se percibe como espacio.
Cuando el oído no encuentra nada que oír, el vacío se percibe como quietud.

Cuando los sentidos, diseñados para percibir la forma, se tropiezan con la ausencia de la forma, la conciencia sutil que está detrás de la percepción, y de la cuál emana
todo percepción, todo experiencia posible, ya no se oculta detrás de la forma.

Cuando contemplamos la grandeza inconmensurable del espacio o escuchamos el silencio en las primeras horas del amanecer, algo resuena dentro de nosotros como en una especie de reconocimiento.
Entonces sentimos que la vasta inmensidad del espacio es nuestra propia profundidad, y reconocemos que esa quietud maravillosa es nuestra más recóndita esencia, más profunda que cualquiera de la cosas que conforman el contenido de nuestra vida.

(Eckhart Tolle )

Meditación Mantra

Cada sonido encierra en sí mismo su propia armonía que es liberada a través de la meditación mantra.

Con su práctica podrás sintonizar con la quietud que reside en ti. 

Cuando quieras conectar con tu conciencia espiritual, repite un mantra para sintonizar con la frecuencia interior.

El sonido del mantra crea una sensación física que vibra en tu cuerpo y mente.

Cuando utilizas el mantra para meditar, también llamada Japa Yoga, callaran los pensamientos que dominan la mente y podrás experimentar tu potencial sintiendo tu verdadera naturaleza.

Lo ideal es que un mantra meditativo esté formado por unas pocas palabras o sílabas para poder repetirlo con facilidad, sin perderse en una frase larga.

Aunque el mantra que elijas este pleno de significado, repitelo como una forma de centrar la mente, no para pensar en su significado, al menos al principio.

Cada mantra produce una experiencia, una vibración que corresponde con su significado, por ejemplo, OM SHANTI, se refiere a la paz suprema del Espíritu Universal, crea una vibración sutil, aunque profunda de paz, HARI OM, se refiere al espíritu que elimina los obstáculos que impiden el despertar, pero también se pueden utilizar palabras como, Amén, Shalom o Paz, cualquier palabra que tenga un significado para la persona que lo practica.

Es importante elegir el mantra que eleve el ánimo, un sonido que inspire e implique al corazón.

Llegara el momento que cada cual elegirá su propio mantra, utilizándolo con regularidad ayudara a experimentar los beneficios de una profunda práctica meditativa.

Antes de empezar a meditar practica alguna asan o pranayama, relajará tu cuerpo y eliminará pautas respiratorias que agitan tu mente.

Para su practica elige una postura en la cual tu cuerpo pueda relajarse, puedes sentarte en una silla o en el suelo con manta o cojín, elige tu propio mudra, cierra los ojos y empieza tu práctica.

Repite tu mantra suave y constantemente, concentrándote en su sonido todo lo que puedas.

Cuando aparezcan pensamientos, vuelve al mantra, no te preocupes, es natural que aparezcan pensamientos, dirige tu atención al mantra cuantas veces sea necesario, y experimenta el sonido interno.

Sal de la meditación respirando profundamente, analiza tus sensaciones, quizá sientas incomodidad por pensamientos procedentes del subconsciente, no te preocupes, es normal y además beneficioso.

Meditar limpia la mente.

Namasté,  Om Shanti.